La era del Dragón

"Parecía extraño que nadie se hubiese dado cuenta, Telmo Irure cerró el periódico y dio una calada a su cigarro, era de los que aun fumaba, Ducados por supuesto.

Los últimos años habían sido convulsos pero nadie se había ido dando cuenta. La tradicional paciencia China había ido apropiándose de la economía mundial, nos habían conquistado.

Empezó por el 96, la devolución de Honk Kong, Macao, dos sistemas un país, fue ayudando a los economistas chino a entender los vericuetos del sistema capitalista, mientras sus fábricas no dejaban de producir.

Luego, a inicio del nuevo siglo fue la captura de África, poco a poco sus minas, o casi todas fueron necesarias para el hambre de materias primas de China.

Lo de Australia fue un paso atrás, el intento de acceder a sus minas, de acceder a sus materias primas,  pero los australianos cerraron sus fronteras a los ciudadanos chinos. Para ellos fue una ofensa, pero no fue entonces cuando la vengaron.

Y llegó la crisis subprime, la codicia occidental era inevitable y tan sólo tuvieron que ahorrar, producir y esperar, el problema no era cuando, sino como... y llegó el momento.

Tras las caídas de los bancos de negocios sólo tuvieron que esperar para que los llamasen para poner su liquidez a disposición de los Gobiernos occidentales. No fue a cualquier precio, por supuesto. 

Se incluyeron en los tratados de compra ciertos contingentes de trabajadores chinos con visado automático, de gama alta, si, pero incansables y ahorradores, preparados pro el partido. También se consiguió que los gobiernos occidentales no viesen mal que los primeros ejecutivos de ciertas compañías fuesen ciudadanos chinos, ya que su gobierno, aprovechando el descalabro y por supuesto desde antes, había tomado el control de petroleras como Exxon y Texaco, compañías como Monsanto o Cargill y químicas como Basf

Durante la crísis subprime consiguieron otros de sus logros, al estrangulase el consumo, bajo el precio del petróleo -al fin- quitando de en medio el chantaje al que se les sometía por parte de países como Rusia o Venezuela.

Luego fue la toma de control de las pequeñas y medianas empresas de los países occidentales. Las tiendas de los chinos, esas de todo a 100, desplegaron una extraña, pero calculada, acción de compra en las diversas ciudades. Fincas de secano, maquinaria industrial, el sector agroalimentario. Pagaban bien, bien para la crisis, pero ni el diez pro ciento de lo que valía  inicio de siglo.

Monsanto consiguió que la Unión Europea diese el visto bueno a su semillas transgénicas, tras una fuerte presión por parte del Gobierno chino, y comenzó a producirse trigo, maíz y cebada a gran escala ¿y los levantiscos agricultores españoles o franceses?.... hacía tiempo que sus tierras habían sido vendidas a laboriosos chinos.

China seguía creciendo, los países occidentales seguían comprado, pero el Yuan dejo lejos al dolar y al euro, hacía que los precios fuesen más altos. China demandaba alimentos, y combustibles, combustibles de origen vegetal, si pero combustibles ¿que pasó de Kioto?...olvidado.

India había seguido un camino parecido, pero no requería tanto de las materias primas, sino que se focalizó el las empresas de alta tecnología. Y poco a poco la Commonwealth se convirtió en las Indianwealth... 

Tan sólo un pequeño grupo de países aun permanecía fuera de la órbita de China e India. Casi todos ellos con grandes de reservas de crudo o materias primas aun no en poder de las empresas chinas. Venezuela y su Chavez, Argentina al mando de Macri, Bolivia, Colombia, México...

Oriente medio, tras la salida de Estados Unidos de Irak y Afganistan con Barack Obama de presidente, había dejado la zona echa un hervidero. Rusia - a traves de Kazastan y Georgia - mantenias sus fronteras a salvo. China e India las suyas habia tensiones, Pakistan, Nepal... pero ejercitos bien armados, mejor alimentados y con los depósitos llenos hacía que las cosas estuviesen bajo cierto control. 

Pero hacia occidente, con Israel acorralado, los islamistas eran un quitate-tu-para-ponerme-yo. Las familias Saudíes, con ejércitos de mercenarios rusos, yugo eslavos, americanos y de casi todo el mundo, mantenían Arabia tranquila, y con ella su petróleo. Pero de Jordania a Marruecos el panorama era desolador."

(Evidentemente todo esto es ficticio)